Medellín tiene su propia ‘Mujer Maravilla’: Lynda Carter es su nombre, tal cual como la actriz que interpretaba a esta superheroína, que todavía está en la memoria de muchos.
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La primera emisión de esta serie fue entre 1975 y 1979, pero luego se hicieron varias temporadas más, por lo que quienes nacieron entre comienzos de los 80 y finales de los 90, tienen muy bien identificado a este personaje.
Aunque no al nivel de la protagonista de esta historia. Su padre, Rober Carter, norteamericano, y su madre, María del Carmen Fernández, colombiana, eran muy fanáticos de las series de los 80. Por eso a su progenitor se le ocurrió que había que sacarle provecho al apellido que compartían y decidió poner Lynda Lucía a su hija.
“Cuando tenía como 5 años comencé a ver la serie de televisión, y a los días me di cuenta que tenía ese mismo nombre, y ahí sentí como una fascinación, me sentí muy identificada con el personaje. Ahí comenzó todo, me volví fanática de ella”, explicó.
No en vano, de ahí para adelante, cada 31 de octubre, en el que era conocido como el Día de los Niños, ella se empezó a disfrazar de la Mujer Maravilla, año tras año.
Por cosas de la vida, esa fantasía duró poco, pues a los 15 años le tocó apropiarse, pero de la fortaleza emocional de ese personaje: “Quedé huérfana, a cargo de cuatros menores, 3 niñas y un niño. La Mujer Maravilla era como inspiración, me mostraba como había que salir a trabajar y mantenerse fuerte”, aseguró.
Cosplayer
A pesar de los años, nunca perdió esa empatía con La Mujer Maravilla, a la que ahora personifica como cosplayer, actividad en la que algunas personas usan accesorios y trajes para representar de la forma más idéntica posible a un personaje específico.
Es tal su éxito que la actriz gringa la ha etiquetado en sus redes y la declaró ganadora de un concurso.
Ella es invitada con frecuencia a diferentes eventos. Este fin de semana estará en Universo de Comics y Videojuegos.
