Este domingo, 16 de marzo, el Vaticano difundió una imagen del papa Francisco, la primera desde su hospitalización en el Policlínico Gemelli de Roma. En esta foto, se logra observar al Pontífice sentado en una silla de ruedas, listo para celebrar la misa en la capilla de su habitación.
Antecedente: “Ánimo, santo padre”: Vaticano publicó la primera foto del papa Francisco desde su hospitalización
No obstante, por un detalle en especial, la foto sorprendió: el religioso argentino aparece de espaldas, lo que ha generado todo tipo de comentarios acerca de la intención detrás de esta elección.
La fotografía que solo deja ver una parte de su rostro, pese a que no revela demasiado, si muestra ciertos detalles como la hinchazón en sus manos, que se podría relacionar con los tratamientos médicos que está recibiendo. Además resalta el hecho de que no lleva cánulas nasales de oxigenación de las que debe usar a diario de acuerdo a los partes médicos del Vaticano.
Foto del papa Francisco trae los recuerdos de una de Juan Pablo II
Esta no es la primera vez que una imagen del Papa causa especulaciones: en la historia reciente, especialmente con Juan Pablo II, la foto del religioso polaco evidentemente deteriorado fue utilizada como un mensaje en sí misma. Cabe recordar su última intervención en el Vía Crucis de 2005, cuando fue filmado de espaldas, al tanto de la misa desde su capilla privada por medio de la televisión.
Tras la última foto del papa Francisco, muchos hablan en las redes sociales de que esta recuerda a la que publicó de Juan Pablo II el Vaticano el Viernes Santo de 2005. Este falleció a la semana siguiente.
El que es considerado uno de los mejores pontífices que ha tenido la religión católica, murió el 2 de abril de 2005 a los 84 años en el Palacio Apostólico, Ciudad del Vaticano.
Se espera que solo se trate de una coincidencia y que el Papa Francisco, quien tiene 88 años, siga luchando por su vida y tenga un buen proceso de recuperación.
Lo cierto es que en ambas ocasiones, se ha demostrado un dato: el Vaticano procura ser muy cuidadoso con la imagen pública del Papa. En instantes como este, donde la salud de Francisco llama la atención de todos los católicos, la foto de espaldas al parecer subraya prudencia y respeto hacia su privacidad. De igual forma, se pretende transmitir que su presencia se mantiene activa, aunque intentando mantener una comunicación comedida que no deja de generar especulaciones.
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