Al menos dos militares resultaron heridos de gravedad, luego de que fueran quemados por parte de un grupo de personas que se oponían a la destrucción de un laboratorio para el procesamiento de hoja de coca en la vereda Siloé del municipio de Villagarzón, departamento del Putumayo.
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Los uniformados forman parte del Batallón de Infantería N.º 25 de la Vigésima Séptima Brigada del Ejército y al momento del ataque tenían como objetivo “neutralizar fuentes de financiamiento ilegal” de las estructuras criminales que delinquen en esa zona.
”Se presentó una asonada por parte de un grupo de civiles, quienes atacaron con fuego a nuestros uniformados con el propósito de impedir el procedimiento”, detalló un comunicado castrense, que señaló que los heridos son un oficial y un soldado profesional, quienes fueron rociados con gasolina.
Quemaduras graves
En entrevista con Caracol Radio, el segundo comandante del Ejército, mayor general Erik Rodríguez, detalló que los responsables lanzaron una mezcla de un líquido entre gasolina y aceite a los soldados y, posteriormente, les prendieron fuego, lo que les ocasionó quemaduras de segundo grado en el 75 % del cuerpo del oficial y en el 30 % del cuerpo del soldado.
De la misma manera, el general Rodríguez aseguró que ya se tienen imágenes del presunto responsable y se trabaja en la identificación del mismo, subrayando que este acto no quedará en la impunidad por ser una evidente violación a los derechos humanos.
”Estas acciones constituyen una grave agresión contra la vida e integridad de nuestros soldados y representan una flagrante violación a los derechos humanos, toda vez que los uniformados cumplían estrictamente con el mandato constitucional de proteger a la población y garantizar la seguridad”, dijo el Ejército, que trasladó inicialmente a los heridos a un centro médico en Florencia, Caquetá, y ante la gravedad de sus heridas fueron llevados a Bogotá.
Recompensa
Las fuerzas militares ofrecieron una recompensa de $ 200 millones por información que permita identificar y ubicar a las personas que atentaron contra los uniformados.
”El Ejército Nacional, a través de este comando, rechaza de manera categórica estas acciones criminales y denunciará ante las autoridades competentes el constreñimiento de la población civil por parte del grupo armado organizado Comandos de Frontera para obstaculizar la ejecución de las operaciones militares, así como las agresiones cometidas en contra de nuestros hombres al servicio de la patria”, anunciaron las tropas.
Dicha recompensa fue reiterada por el ministro de Defensa, Pedro Sánchez, quien se sumó al rechazo de estos hechos, además de pedir a los colombianos denunciar los distintos actos criminales, garantizando una absoluta reserva.
La semana pasada el país fue testigo de la retención durante varios días de 33 soldados por parte de la comunidad en zona rural del municipio de El Retorno, en el departamento del Guaviare, que exigía explicaciones a la muerte en extrañas circunstancias de un civil.
Redacción Colprensa.
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