Ante el impacto de la gentrificación, la inflación y las nuevas dinámicas del mercado inmobiliario, las personas aún se preguntan si conviene mejor un arriendo directo o por medio de una agencia inmobiliaria que administre la propiedad, tanto para el arrendador como para un inquilino.
Acá hay cinco diferencias para que escoja lo que mejor se acomode a sus necesidades:
1. Búsqueda y publicidad
- Contrato directo: usted puede pegar el aviso en su fachada de arriendos en Colombia, comentarlo con amigos y familiares, buscar algún portal gratuito que permita publicar su propiedad en internet. De igual manera, debe tener presente que al momento en el que resulte alguien interesado, debe contar con disponibilidad de tiempo para poder enseñarle su inmueble.
- Inmobiliaria: puede pegar o no un aviso en la fachada, sin embargo, la inversión principal que realizan estas se destinan en portales con alto tráfico de visitas, además de la red de clientes que buscan constantemente. Además, un asesor inmobiliario estará disponible para acompañar al cliente y enseñar el apartamento o casa.
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2. Estudio de capacidad de pago y contrato
- Contrato directo: este es un aspecto que puede ser un poco más complicado para el propietario, saber que documentación específica solicitarle al interesado en el inmueble y analizar los documentos para acreditar que la persona tenga solvencia económica. Se debe tener en cuenta la realización y firma del contrato de arrendamiento; normalmente puede encontrar en internet modelos, los cuales tienen plena validez legal.
- Inmobiliaria: trabajan de la mano con aseguradoras o afianzadoras y estas se encargan de un estudio completo de la capacidad crediticia de la persona interesada en arrendar su propiedad, consultan en centrales de riesgo y validan que la documentación presentada sea real.