Pero es que no era cualquier cosa: el predio había sido acondicionado con tecnología de cultivo tipo invernadero y zonas de secado y dosificación. El estupefaciente era destinado a clientes exclusivos mediante la modalidad de entrega a domicilio, y una parte del producto era sometido a procesos de extracción de tetrahidrocannabinol (THC) para su uso en dispositivos electrónicos.
Medidas para no levantar sospecha
Algo que llamó la atención de las autoridades es que, en la fachada del lugar, habían instalado un banner con logos falsos de la Policía Nacional, simulando una supuesta autorización para el uso médico y científico del cannabis. Esta fachada buscaba evadir controles legales.
“Este predio, camuflado con logos falsos de la Policía Nacional, simulaba una supuesta legalidad médica y científica, siendo en realidad una fachada para fortalecer las finanzas del Grupo Delincuencial Organizado (GDO) La Terraza”, indicó Manuel Villa Mejía, secretario de Seguridad de Medellín.
Les dieron tremendo golpe. Según las autoridades, con este operativo lograron afectar las rentas del Grupo Delincuencial Organizado La Terraza por un valor estimado de $ 2345 millones de pesos.
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