Tiene 63 años y es arzobispo de Bogotá.
Luego del anuncio de la muerte del papa Francisco en la mañana de este lunes, 21 de abril, ya se empezó a poner sobre la mesa la pregunta sobre quién será su sucesor. De hecho, Colombia tiene un cardenal que podría ser elegido.
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Se trata de Luis José Rueda Aparicio, arzobispo de Bogotá, de 63 años de edad, quien nació en el municipio de San Gil, Santander.
Y es que en Colombia, tres cardenales fueron reconocidos por el Papa Francisco. De ellos, dos ya son eméritos debido a su edad, ellos son: Rubén Salazar Gómez y Jorge Enrique Jiménez, ambos de 82 años.
Por lo que solo el cardenal Rueda podrá votar en el próximo cónclave (la reunión donde por medio de votación se elegirá al sucesor), o incluso, ser elegido.
“El pueblo colombiano, la iglesia que peregrina, ora y trabaja en Colombia, siente el dolor de la partida del sucesor de Pedro, del Santo Padre papa Francisco, que nos amó y amó a la humanidad, que anunció la buena noticia, que proclamó el evangelio, que fue misionero en los 5 continentes”, dijo el cardenal Rueda a medios de comunicación.
Además, el cardenal Rueda aseguró que en la Catedral Primada de Bogotá se realizarán tres eucaristías a las 12 del mediodía desde hoy lunes y hasta el miércoles, para orar en honor al papa Francisco.
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Incluso, confirmó que estará presente en el cónclave para la elección del nuevo papa y las exequias de Francisco, por lo cual señaló que viajará al Vaticano el miércoles, 23 de abril.
Para el cónclave se convoca a los integrantes del Colegio Cardenalicio, un cuerpo de alto rango dentro de la Iglesia Católica que agrupa a todos los cardenales nombrados por el papa.
Actualmente, este colegio cuenta con 252 cardenales. De ellos, 139 tienen menos de 80 años, es decir, pueden participar en la elección del nuevo pontífice.
Tras la muerte del papa, la Iglesia tiene de 15 a 20 días de plazo para organizar el cónclave, el cual se realiza a puerta cerrada en la Capilla Sixtina. Al menos dos tercios de ese cuerpo de cardenales debe estar a favor de una determinada persona.
Cuando lo anterior no se cumple y no se alcanzan los votos, sale humo negro, mientras que cuando se obtiene el resultado, el humo que se emite desde dicha capilla es blanco.
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