Andrés Felipe Marcelo Avendaño Vélez era un hombre que desde hace 5 años vivía en el sector Bombillo Rojo, del barrio Nuevo Jerusalén, del municipio de Bello.
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La última vez que sus vecinos vieron con vida a este hombre de 42 años de edad, fue el pasado 18 de junio. Desde ese entonces no volvieron a saber nada de él, ni si quiera su madre, con la cual llevaba cerca de un mes sin hablar por algunos disgustos. Los días pasaron y no se tenía noticias de Avendaño Vélez.
El pasado, lunes un habitante del sector sintió un fuerte olor a descomposición, pero no prestó atención porque era normal, debido a que la zona habitualmente arrojan perros y gatos muertos.
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Sin embargo, este jueves 27 de junio, el propietario del inmueble donde vivía Andrés Felipe, pasó a darle una vuelta, sintió el olor en el ambiente, se agachó para mirar debajo de la puerta y descubrió que de ahí provenía el desagradable olor, por lo cual llamó a la Policía.
Las autoridades llegaron al sector, ingresaron a la residencia y encontraron que se trataba de Andrés. El cadáver fue inspeccionado por funcionarios del Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía y después del procedimiento no lograron establecer las causas del deceso.
