Este domingo, 28 de enero, la Mona Lisa volvió a llevar del bulto en Francia , ya que el famoso cuadro de Leonardo da Vinci se ha convertido en el objeto preferido de los activistas cuando quieren llamar la atención para sus protestas.
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En la mañana del domingo, siendo las 10:00 a.m. en hora francesa, dos mujeres activistas le arrojaron sopa al valioso cuadro que está alojado en el Museo del Louvre, el cual no solo es el más visitado de París, sino del mundo.
Estas dos mujeres aprovecharon la calma del lugar para irrumpir, pero no lograron penetrar la obra porque ella está cubierta con cristal grueso.
Además de tirar la sopa, entraron al espacio cerrado de la Mona Lisa para quitarse las chaquetas y develar camisetas con el motivo de su protesta: “Riposte Alimentaire”.
Al español eso traduce “respuesta alimentaria” y es un acto que se suma a las protestas que ya han venido realizando agricultores franceses con el fin de que el Gobierno brinde mejores condiciones para su oficio.
Particularmente, han venido pidiendo que se frene el aumento de los costos del combustible y que sus regulaciones sean más simples. Incluso, el pasado viernes, 26 de enero, bloquearon la entrada y la salida de París.
Con el video de la protesta, estas dos mujeres consiguieron lo que querían, una exposición masiva y no solo local, sino mundial porque su acto ha tomado fuerza viral en Internet.
Eso sí, como hay quienes celebran la valentía de estas ambientalistas, hay quienes la cuestionan y les parece paradójico que protesten por seguridad alimentaria botando comida.
Esta no es la primera vez que sucede algo parecido, recordemos que en mayo de 2022 también le lanzaron un pastel al cuadro como forma de protesta por temas ambientales.
