El silencio que dejó la tragedia aún pesa. Mientras avanzan las investigaciones por el accidente que cobró la vida de 17 personas en la vía que comunica a Medellín con la Costa Caribe, familiares de las víctimas comenzaron a alzar la voz. Aseguran que el bus en el que viajaban los estudiantes presentó fallas mecánicas antes de caer al abismo y que los jóvenes alcanzaron a advertir la situación.
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El siniestro ocurrió en el sector El Chispero, entre los municipios de Remedios y Zaragoza, cuando el vehículo que transportaba a un grupo de estudiantes que regresaba de una excursión escolar se salió de la carretera. En el hecho murieron 16 jóvenes y el conductor, y otras 15 personas resultaron heridas, varias de ellas con lesiones de consideración.
De acuerdo con los testimonios de los familiares, el bus empezó a presentar problemas durante el trayecto de regreso. Algunos estudiantes lograron comunicarse con sus familiares y habrían contado que el vehículo se detenía constantemente y avanzaba con dificultad, generando preocupación entre quienes iban a bordo.
Uno de esos relatos es el de Óscar Gutiérrez, abuelo de Valeria López Estrada, una de las jóvenes fallecidas. Él contó que su nieta lo llamó en medio del viaje: “El bus venía con fallas, nos llamó y nos dijo que estaba varado. La mamá le dijo que se bajara, pero siguieron andando”, relató.
Según la versión de la familia, las paradas eran frecuentes, con cortos intervalos, y los pasajeros incluso debían abrir las ventanillas para poder respirar con normalidad. También aseguran que los jóvenes pidieron que se les enviara otro vehículo, solicitud que, según dicen, no fue atendida.
Para los familiares, estas alertas previas deben ser tenidas en cuenta en la investigación. Por eso cuestionan que, en las primeras hipótesis, se haya hablado de un posible microsueño del conductor y piden que se revise a fondo el estado mecánico del bus y las decisiones tomadas durante el recorrido.
“No fue algo de un momento a otro. Ellos avisaron que algo no estaba bien”, insistió Gutiérrez, quien recordó a su nieta como una joven dedicada al estudio y muy cercana a su familia.
Las familias también solicitaron que se investigue la responsabilidad de la empresa de transporte y que se verifique si el vehículo cumplía con las condiciones técnicas exigidas para un viaje de este tipo. Piden que el caso no quede sin respuestas y que se refuercen los controles para evitar que situaciones similares vuelvan a ocurrir.
La empresa prestadora del servicio de transporte se pronunció
María Elena Molina, gerente de Precoltur, aseguró en diálogo con Noticias Caracol que desde el primer momento entregó toda la información requerida a las autoridades y que están dispuestos a colaborar plenamente con la investigación.
Señaló que el conductor llevaba dos años vinculado a la empresa y contaba con contratos directos, y explicó que tanto la hipótesis del microsueño como la de una falla técnica son asuntos que están en manos de los investigadores.
La directiva afirmó que el vehículo “estaba bien” y recordó que en los 40 años de trayectoria de la empresa nunca habían enfrentado una tragedia de esta magnitud. “Estamos demasiado tristes con la pérdida de estos chicos, nos ha dolido en el alma”, expresó, enviando un mensaje de solidaridad a las familias de las víctimas.
Mientras Medicina Legal avanza en la entrega de los cuerpos, en Bello y en otros municipios se preparan actos de despedida. Se espera que en las próximas horas se realice un sepelio colectivo. Por otro lado, se conoció que cinco de los estudiantes que resultaron heridos ya fueron dados de alta, en medio de un duelo que sigue marcando a muchas familias en Antioquia.
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