Cuando pasó los 65 años, las empresas dejaron de tenerlo en cuenta como candidato para los trabajos y él optó por crear su propia fuente de ingresos.
No cuenta con muchos recursos, pero de forma improvisada montó una barbería ambulante en una carreta, con la cual estuvo durante 10 años en el Bazar de los Puentes.
Ahora está ubicado (hace 11 años) en inmediaciones de la estación Prado del metro, al frente de “Pollos Éxito” y compite con entre 28 y 30 barberos que se hacen en esa misma cuadra.
¿Cómo lo hace? El viejito José Darío Zapata compite con el precio: “Soy el barbero que trabajo más barato en Medellín (...) hace 21 años comencé cobrando 1000 pesos, hoy estoy cobrando 4000 pesos, de pronto hasta 2 o 3”.
Al día, cuando hay buen trabajo, hace 10 cortes. Pero también hay veces en los que solo hace cuatro cortes y ahí es donde se le complica todo.
Y es que este señor vive con 25.000 pesos diarios, que los divide en 15.000 de dormida, 6000 para la guardada de la carreta y el resto en comida; compra almuerzos de 2000 pesos.
“Cuando no puedo llegar a los 25.000 pesos es cuando tengo que dormir en la carreta”, contó el longevo barbero.
Adicional, este adulto mayor lucha a diario con problemas de salud, especialmente con la mala circulación de una de sus piernas.
Sin embargo, cada día tiene una sonrisa para sus clientes y se da por bien servido cuando recibe un “mi Dios le pague”.