La ciudadanía confía en la Policía porque su labor es defendernos de los delincuentes, por eso es tan inaudito conocer casos en donde los mismos uniformados resultan ser los presuntos responsables de delitos, como es el caso de la subintendente Deimy Zuley Castellanos Castiblanco.
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Resulta que esta policía y su hermano, Giovanny Alexánder Castellanos Castiblanco, fueron enviados a la cárcel por presuntamente haber estafado a un empresario en Medellín por tremenda millonada.
Según lo informado por la Fiscalía tras sus investigaciones, estos hermanos habrían montado una especie de red para adquirir préstamos de altas sumas de dinero basados en engaños.
Al parecer, funcionaban así: los hermanos obtenían prendas de vehículos engañando a los propietarios, ya que les hacían creer que los automotores los estaban arrendando para el transporte de extranjeros.
Pero después de eso, lo que presuntamente hacían era reclutar personas que se hacían pasar como los dueños de esos vehículos, con documentación falsa.
Y acá viene la peor parte, porque esas personas supuestamente iban donde el empresario engañado a pedir préstamos con estas falsas prendas de garantía.
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Luego estas personas, presuntamente, iban con el dinero donde Deimy y Giovanny. Ellos se quedaban con una parte y entregaban lo demás.
Según la Fiscalía, eso sucedió entre junio y julio del año pasado y así habrían logrado obtener préstamos por la bobadita de $ 460 millones.
Y aunque los dos presuntos responsables fueron capturados por el CTI con el apoyo de la Policía para ser llevados a audiencia, ellos no se allanaron a los cargos.
Sin embargo, les impusieron medida de aseguramiento en centro carcelario señalados de estafa agravada, falsedad material en documento público y falsedad en documento privado.
