El Consejo de Estado dictó la nulidad de la elección de Juan Carlos Upegui como concejal de Medellín, determinando que incumplía el régimen de inhabilidades al momento de su candidatura.
Antecedente: ¡Atención! Juan Carlos Upegui ya no es concejal de Medellín
Esta decisión llega después de un proceso iniciado por la Personería y respaldado por el Tribunal Administrativo de Antioquia, que puso en tela de juicio su elegibilidad para ocupar el cargo. La salida de Upegui no solo significa el fin de su participación en el Concejo, sino también la de su equipo de trabajo, con implicaciones políticas inmediatas para la ciudad.
La razón detrás de esta anulación está en el nombramiento de su padre, Carlos Alberto Upegui Mejía, como rector de un colegio público en Medellín. Dicho nombramiento ocurrió solo 22 días antes de que Juan Carlos Upegui se inscribiera como candidato a la Alcaldía, lo cual violó una norma que prohíbe que familiares de candidatos ejerzan “autoridad civil, política, administrativa o militar” en el año previo a las elecciones. Este incumplimiento del régimen de inhabilidades fue determinante en la decisión final del Consejo de Estado.
La anulación de la elección de Upegui también implica un cambio significativo en la composición del Concejo de Medellín. Su curul será ocupada por Camila Gaviria Barreneche, del partido Creemos, lo que refuerza la coalición del excandidato a la Alcaldía, Federico Gutiérrez (Fico). Este nuevo nombramiento fortalece a la oposición del grupo político de Upegui y del excalcalde Daniel Quintero, padrino político de Upegui.
Aunque Juan Carlos Upegui no se ha pronunciado directamente tras la decisión, Daniel Quintero sí lo ha hecho. El exalcalde criticó abiertamente la decisión del Consejo de Estado, señalando que su movimiento político ha sido blanco de decisiones judiciales adversas en los últimos tiempos. Quintero destacó la reciente destitución del alcalde de Apartadó, también miembro de su grupo político, como otro ejemplo de lo que calificó como “justicia selectiva”.
En sus declaraciones, Quintero afirmó: “La justicia en Colombia es selectiva. Hay que arreglar la justicia en Colombia y la vamos a arreglar”.
Este tipo de comentarios ha generado un fuerte debate sobre el respeto a la independencia de la Rama Judicial, mientras el panorama político en Medellín se sigue moviendo en torno a la salida de Upegui y las implicaciones de este cambio en la composición del Concejo. La decisión de nombrar a Gaviria Barrenechea también representa una victoria para el partido Creemos, sumando otro aliado a su coalición y reforzando su influencia en las decisiones locales.
La anulación de la elección de Upegui marca un giro importante en la política de Medellín, y plantea nuevas preguntas sobre la gestión de inhabilidades en futuras elecciones locales.