El Tribunal Superior del Distrito Judicial de Neiva ratificó la condena a 14 años de prisión de Stevan Andrés Rosero Derazo, un expatrullero que violó a un compañero de la institución mientras este se encontraba en uno de los baños de una instalación policial.
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Los hechos sucedieron en noviembre de 2013 en la sede del Escuadrón Móvil de Carabineros ubicado en Neiva. De acuerdo con la investigación, ese día se había ido la luz, por lo que el condenado aprovechó para sorprender a la víctima en el momento en que este ingresó a uno de los baños.
Según contó la víctima, Rosero Derazo lo golpeó, lo doblegó y cometió el abuso sexual aprovechando la situación de vulnerabilidad en la que había quedado.
Tras la denuncia, un fiscal adscrito al Centro de Atención Integral a Víctimas de Abuso Sexual (Caivas) investigó los hechos y profirió la sentencia condenatoria en 2020; sin embargo, la defensa del expatrullero apeló la decisión.
Y es que, de acuerdo a los abogados, todo se había tratado de una relación sexual voluntaria y consensuada, hecho que fue negado por la víctima.
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Finalmente, tras la revisión del caso, los magistrados del Tribunal confirmaron el relato de la víctima y ratificaron la sentencia, que el condenado ya está pagando en un centro carcelario de Huila.
“La víctima rememoró que Rosero Derazo nunca le sugirió o propuso tener relaciones sexuales y menos aún que tuvo en cuenta su voluntad para tener cualquier tipo de encuentro sexual con él, por el contrario, optó por someterlo al ultraje ya mencionado”, explicó la magistrada encargada Juana Alexandra Tobar Manzano.
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