Ha existido un consenso en Colombia desde hace varios años sobre la necesidad de una reforma pensional que le dé a todas las personas la posibilidad de disfrutar de una vejez digna, lo que significa que más personas se pensionen y tengan un ingreso en la vejez; que sea sostenible, es decir que el país pueda pagarlo a largo plazo, que no solo cubra a la generación actual de adultos mayores sino también a los más jóvenes; y que la asignación de subsidios por parte del Estado sea equitativo, para que estos sean
otorgados a la población que realmente lo necesita.
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Hoy el proyecto que están estudiando los Congresistas y que fue presentado por el Gobierno del presidente Petro incluye algunos aspectos que podrían representar una mejora frente al sistema pensional actual:
- La propuesta promueve una estructuración de un sistema que evita la competencia que hay entre los dos regímenes (público administrado por Colpensiones y privado administrado por las AFP como Protección) y propone un modelo complementario.
- Limita los subsidios a las pensiones altas (aunque no los elimina).
- Amplía la cobertura a la población más vulnerable y en pobreza extrema proponiendo un subsidio aproximado de $ 223.800 mensuales calculado para 2023.
- Incluye un enfoque de género, al buscar corregir algunas deficiencias que hoy tiene el sistema pensional con las mujeres.
Uno de los puntos que más debate y discusión ha tenido es lo que se ha denominado el umbral. Es decir, hasta con cuántos salarios mínimos la gente tiene que cotizar en Colpensiones y a partir de cuantos pueden cotizar en las AFP en el pilar contributivo. El gobierno y algunos congresistas se mantienen firmes en que el umbral para definir quienes deben cotizar a Colpensiones debe ser hasta 3 salarios mínimos y otros congresistas piden bajarlo hasta 2.