La mejor recomendación siempre será acudir a un médico o un especialista para consultar si tenemos algún problema de salud mental. Pero existen algunos hábitos y comportamientos que podemos seguir en nuestra vida diaria que nos ayudan a disminuir el riesgo o detectar a tiempo alguna enfermedad.
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Los factores que inciden de forma negativa en nuestro bienestar pueden estar más cerca de lo que creemos, pero del mismo modo las soluciones quizás estén al alcance de todos.
Siguiendo estos consejos, podemos disminuir el riesgo.
. Ejercicio: la actividad física mejora el estado de ánimo. Haga al menos 30 minutos diarios, incluso caminar por su casa funciona.
. Nutrición: consuma alimentos y comidas saludables con regularidad, y manténgase hidratado. Tome agua con frecuencia.
. Sueño: establezca un horario y asegúrese de dormir suficiente tiempo. No abuse de las pantallas antes de acostarse.
. Descanse: practique una actividad que lo relaje, cualquiera que sea, pero en la que su mente y su cuerpo cambien de la rutina diaria.
. Positivo: intente que todos sus pensamientos y sus acciones sean positivas. Descarte aquellos que no le sumen buena energía.
. Gratitud: recuerde todos los días cosas por las que esté agradecido. Sea específico. Anótelas o repítalas en su mente cuantas veces pueda.
. Respire: acuda a prácticas como la meditación o la respiración consciente, que le ayuden a reducir el estrés y a pensar con más claridad.
