Conozca para qué sirven y cuál es el adecuado manejo que se les debe dar.
Las personas con discapacidad pueden acceder a ayudas técnicas como productos, accesorios, sistemas técnicos o equipamientos que les ayudan a para aumentar su autonomía.
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Estas están diseñadas para compensar sus limitaciones funcionales y promover su independencia e inclusión en diversos aspectos de su vida, como moverse, comunicarse, informarse o cuidar su aspecto personal.
¿Qué tipo de ayudas existen? Entre otras, hay sillas de ruedas, caminadores, muletas, barras de apoyo, elevadores de sanitarios, platos y vasos adaptados, cubiertos flexibles y antideslizantes, antideslizantes para el suelo.
También existen la órtesis o férulas y prótesis. Mientras estas sustituyen o reemplazan una parte o extremidad faltante, la órtesis o férulas son dispositivos externos que previenen o tratan lesiones.
Mantenimiento:
- Recuerde que estos elementos se deterioran por su uso continuo. Revíselos constantemente y hágales una limpieza adecuada, para garantizar su seguridad y eficacia.
- Lea y conserve el manual de uso para futuras consultas. En él encuentra recomendaciones de uso, limpieza y mantenimiento, así como la garantía.
- Póngale mucha atención a las baterías de su silla de ruedas.
- Revise las condiciones ambientales del lugar en el que los guarda: que no haya humedad, no caigan los rayos directos de sol ni estén expuestos a químicos entre otros.
- Para las ayudas que tengan ruedas o llantas, haga una revisión mensual de la presión y su estado, frenos, respaldo y partes móviles. Cada trimestre vigile que todos los tornillos están bien fijados y que los ejes, reposapiés, tapicerías y el armazón de la silla estén limpios y en buen estado.
- Lubrique una vez al mes los ejes o puntos de fricción o rodamiento de las llantas, y si escucha sonidos que indiquen desajuste o resequedad de las estructuras.
- Por motivos de higiene y seguridad, los cojines, colchonetas o colchones antiescaras son de uso personal. No los comparta.
- Los elementos de las ayudas técnicas como respaldo, asiento, empuñadura, asiento, reposabrazos, reposapiés, etc. se pueden limpiar con un trapo humedecido en limpiador diluido en agua tibia. No empape las partes metálicas y no use productos abrasivos para evitar oxidarlas.
- Para las ruedas, se pueden usar limpiadores para neumáticos, el de bicicleta es el más conveniente pues no deja residuos.
- Este es un dispositivo externo que se utiliza al cuerpo para modificar aspectos funcionales o estructurales del sistema neuromusculoesquelético, es decir, para corregir deformidades, inmovilizar o sostener una articulación, o para descargar las articulaciones afectadas.
- Si le indicaron que lo debe usar continuamente, límpielo con un paño húmedo (sin jabón) y séquelo con toalla de papel. Nunca lo exponga a calor directo (combustión lenta, estufas, secador de pelo, cocina, agua caliente, etc.).
- Si se puede meter en la lavadora, coloque la órtesis en una bolsa de lavado y lávela con un detergente suave en un ciclo frío o a una temperatura inferior a 30 °C.
- Si la férula empieza a oler debido al sudor, etc., pruebe utilizando una pequeña cantidad de crema dental, como si fuera jabón y enjuágate después. O use alcohol para frotar y un paño para limpiar su interior.
- Limpie la férula con un paño por dentro y por fuera, como lo hace con su computadora portátil o el teclado.
- No introduzca objetos, lociones ni polvos dentro de la férula, prótesis u órtesis.
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