Si hoy es posible abrir la llave y disfrutar de agua potable, es gracias al trabajo constante de mantenimiento y mejora que EPM ha realizado durante años en el sistema de acueducto del Valle de Aburrá.
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Algunas de estas labores pasan desapercibidas porque no interrumpen el servicio, pero otras, como la modernización de la planta Manantiales, sí lo requieren hacer de manera temporal. La obra, que iniciará este viernes, 9 de octubre, exige una interrupción programada del servicio desde este jueves hasta el lunes festivo, 13 de octubre, e impactará a más de un 1.100.000 personas (439.000 instalaciones).
LA CIFRA: $ 312.000 millones es la inversión total en las obras de la planta de tratamiento.
La interrupción será escalonada, es decir, los horarios serán diferentes para cada barrio o sector: comenzará este jueves en la tarde, continuará el viernes, y el servicio empezará a restablecerse desde el domingo en la tarde hasta el lunes festivo en la madrugada.
“Lo que hacemos en Manantiales es una apuesta por el futuro, por la seguridad hídrica, especialmente del norte del Valle de Aburrá. Pensamos siempre en la calidad del servicio de acueducto y su continuidad para que el 100 % de los barrios que están en el área de prestación, lo tengan y lo disfruten siempre”. Humberto Iglesias Gómez, vicepresidente de Negocios de EPM