Mitriotti fue el creador del comercial de Doña Gañina, en el que un niño que sale cantando hacia la tienda, y de la icónica pieza publicitaria de Pepsi que lanzó a Sofía Vergara al estrellato.
Pero una de las series más recordadas por los colombianos, y que también fue dirigida por él, fue ‘Pandillas, guerra y paz’. Por eso, con ocasión de su fallecimiento, recordaremos a quienes trabajaron en esa producción y ya abandonaron la vida terrenal.
Ellos son los actores de ‘Pandillas, guerra y paz’ que ya murieron:
Luis Fernando Ardila (1954-2004)
El pereirano le dio vida al coronel Leal. El 18 de noviembre de 2004 fue víctima de un ataque sicarial orquestado por su pareja sentimental para cobrar un seguro de vida. El actor era abiertamente homosexual.
José Luis Paniagua (1960-2013)
Era cotarricense, pero nacionalizado colombiano. Interpretó a Nostradamus y falleció el 6 de mayo de 2013 por complicaciones de salud. Padecía cáncer de estómago.
Julián Madrigal (1954-2013)
Su nombre real era Adolfo Julio Navarro Martínez. Fue asesinado a los 59 años por sujetos que ingresaron a robar a su casa en Bogotá. Ocurrió el 7 de septiembre de 2013, después de cobrar un dinero por interpretar un personaje.
En ‘Pandillas, guerra y paz’ le dio vida a Luis Alfonso Marín, alias el Tío.
Carlos Muñoz (1934-2016)
El reconocido actor le dio vida al senador Germán Forero. Murió el 11 de enero de 2016 por una bacteria que afectó sus pulmones mientras estaba hospitalizado por una cirugía de hernia hiatal (entre el estómago y el esófago).
Fernando Corredor (1937-2016)
También interpretó a un político, al senador Alberto Peláez. El actor paisa murió el 24 de diciembre de 2016 mientras estaba hospitalizado, tras ser atropellado por una moto.
Julio del Mar (1943-2019)
En ‘Pandillas, guerra y paz’ hizo un personaje llamado Esteban. Murió a los 75 años, el 19 de agosto de 2019 en Bogotá, por complicaciones de salud derivadas de un accidente cerebrovascular.
Rafael Uribe Ochoa (1960-2020)
Interpretó a Tetris y murió el 15 de septiembre de 2020 tras pasar 15 días hospitalizado en una unidad de cuidados intensivos a causa de un infarto.