“Me encontré con este hombre maravilloso que estaba publicando contenido increíble en un país del que no sabía nada. Me intrigaba mucho cómo la gente todavía vive esta forma de vida y hasta cierto punto sabía que había tribus en el Amazonas, pero nunca me había tomado el tiempo para aprender sobre ello”, expresó la joven.
“No podía creer que alguien que se crió en la selva amazónica, en ese pedazo de tierra exótica, me respondiera. Para una chica que vive una vida occidental en la costa de Queensland, que siempre va a la playa y vive en una casa, hablar con alguien del Amazonas que vive en una cabaña era tan surrealista”, relató Jordan.
Fueron cuatro vuelos y más de 30 horas con paradas en países como Perú, Argentina, Brasil y por supuesto Ecuador, desde donde tuvo que tomar un bus por cinco horas desde Quito hasta la comunidad Guayusa Runa, hogar de su nuevo novio.
Allí pasó varias semanas conociendo la selva amazónica y disfrutando de las actividades de la reserva, en la que la familia de Pitiuruk realiza visitas guiadas a turistas. Su experiencia quedó consignada en sus videos de Tiktok.
Sin embargo, tuvieron que pausar su idilio de amor pues Jordan tuvo que regresar a su país para poner sus asuntos en orden y recoger más dinero, ya que decidió mudarse de manera permanente a la casa de su ‘Tarzán’ de la vida real, por lo que está haciendo campaña en sus redes para recolectar los recursos necesarios.