Luego de terminar con éxito el proceso de resocialización, el cual consiste en una estrategia integral que los acompaña en la resignificación de sus proyectos de vida, un grupo de 38 exhabitantes de calle se graduaron en un evento que representa la confirmación de que Medellín sigue construyendo oportunidades para quienes tienen voluntad de cambio.
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De este grupo, que durante 12 meses recibió atención psicosocial, fortalecimiento de redes de apoyo, nutrición y formación en habilidades para la vida y el trabajo, ya el 42 % cuenta con empleo formal, gracias a este acompañamiento educativo.
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“Estas personas culminan una etapa de acompañamiento con herramientas de formación técnicas y habilidades para la vida, que les permite no solo al 42 % de ellos encontrar empleo, sino emprender o abrir otras oportunidades según sus preferencias”, expresó la secretaria de Inclusión Social y Familia, Sandra Sánchez.
Como parte de su formación, las personas participaron en cursos ofrecidos por el Sena, como servicio al cliente, informática, gestión humana, emprendimiento, panadería y jardinería, entre otros. Además, contaron con orientación en habilidades blandas, elaboración de hojas de vida, entrevistas laborales y manejo financiero personal. Como resultado de esto está que, además de que el 42 % ya cuenta con un empleo formal, el 24 % trabaja de manera informal.
