En su llegada a la iglesia y como una forma de honrar su entrega al ciclismo, múltiples deportistas llevaron sus bicicletas con el fin de hacerle una calle de honor al féretro de Marlon.
Entre las personalidades del deporte que lo acompañaron estuvieron Mauricio Vargas, presidente de la Federación Colombiana de Ciclismo, y César Sánchez, excomisario internacional. Además de varios competidores de este deporte, como Juan Pablo Suárez, Álex Cano, Juan Pablo Rendón, Juan Diego Ramírez, Jhon Fredy Parra, Juan de Dios Fajardo, Héctor Mesa, Alejandro Ramírez, Hernán Darío Bonilla y Ariel Martínez.
Las personas más cercanas al ciclista lo recordaron como un deportista alegre, extrovertido y muy sincero. Además aseguraron que Marlon no solo fue importante para su familia, sino que gracias a sus victorias será recordado como uno de los más grandes en el ciclismo colombiano.
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Entre los logros más destacados del antioqueño está su título en el Campeonato Mundial Juvenil de Ecuador-1994 y ser el abanderado de Colombia en los Juegos Olímpicos de Atlanta-1996.
Su debut como ciclista profesional fue en el 2000 y al retirarse se dedicó a ser el guía del ciclista paralímpico Javier Serna en la categoría tándem, en la que fueron campeones mundiales. Él también estuvo en el lugar para despedirse de su compañero de ruta.