El ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, confirmó la medida y explicó que, tras una inspección realizada en la sede del equipo, se encontró mora en el pago de salarios, primas, prestaciones y aportes a la seguridad social de jugadores, empleados y contratistas.“Esta suspensión se mantendrá hasta que se certifique el cumplimiento de todas las obligaciones pendientes”, afirmó Sanguino.
Mientras tanto, en las calles de Pereira, los hinchas salieron a protestar. Con camisetas, pancartas y cánticos, exigieron respeto por el club y una solución inmediata. Las manifestaciones generaron bloqueos en vías principales de la ciudad y un fuerte despliegue de la Policía.
El panorama del Grande Matecaña es cada vez más oscuro. El Ministerio del Deporte también abrió un proceso sancionatorio que podría llevar a la suspensión del reconocimiento deportivo, lo que dejaría al Pereira fuera de los torneos de Dimayor.
La crisis se refleja en la cancha: tras el paro de los jugadores profesionales el pasado 24 de octubre, el equipo no se presentó al partido frente a Águilas Doradas y tuvo que jugar con su nómina sub-20, cayendo goleado 5-1. Días después, el mismo grupo perdió 4-0 con Pasto.
El técnico Rafael Dudamel ya presentó su renuncia, al igual que varios futbolistas. Aunque la dirigencia asegura que ha hecho abonos y pagos parciales, la situación parece insostenible.
Con 18 puntos y eliminado de los cuadrangulares, el Deportivo Pereira no solo está fuera de la pelea deportiva, sino que podría quedarse sin jugar si no resuelve pronto sus problemas legales y económicos.
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