Los acompañan a hacer vueltas y hasta a jugar parqués o cartas.
Un grupo de jóvenes decidieron convertirse en compiches de los adultos mayores, para hacerles la vida más alegre.
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Compi, como se llama esta iniciativa, nació tras un trabajo universitario, pero se convirtió en un emprendimiento, que hoy cuenta con un alto número de colaboradores y además realiza un destacado trabajo social con los abuelitos.
“Compi viene como de compinche, compañía, amigo”, indicó Adelaida Gutiérrez Aristizábal, la joven de 26 años que lidera el proyecto.
“La idea surge en un ejercicio en la U de esta problemática social, porque varios compañeros teníamos una persona mayor, que queríamos que estuviera mejor. Nos cuestionábamos de la forma en la que se vive la vejez”, recordó.
En la pandemia hicieron cursos de tecnología a las personas mayores. A ello se vieron motivados, porque conocieron muchas personas que no sabían manejar su celular.
“En ese momento entendimos que esas personas se conectaban a las clases para conversar con nosotros, para hablar de cómo había estado nuestro fin de semana y el de ellos y vimos que se generaba una amistad, que ellos necesitaban compañía”, explicó Adelaida.
Dice que ella y sus amigos se convirtieron en un puente para que estos adultos pudieran seguir compartiendo con el mundo, “era como si esos raticos los llenaran de alegría y de vida”.
A emprender se dijo
En el 2021 decidieron que su idea se convirtiera en un modelo sostenible: “Empezamos a conseguir jóvenes con admiración por las personas mayores, con disposición para estar con ellas”.
Fue así como comenzaron a ofrecer su servicio en 3 líneas: asistencia tecnológica, para instruirles y ayudarlos en el manejo de diferentes herramientas; compañía de calidad en casa, que les permite disfrutar de diferentes actividades, como juegos de mesa; y acompañamiento a trámites en la EPS, el Banco, etc.
En Compi buscan el financiamiento con diferentes entidades, para avanzar en proyectos con estas comunidades.
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Actualmente hacen labor social en el Asilo de El Retiro, con el que están vinculados desde hace 4 años. También en el Centro de Bienestar al Anciano San Bernardo, en La Estrella, donde además buscan conocer el impacto que este acompañamiento en la salud mental de los mayores.
Así, vale la pena reflexionar si usted le está brindando a sus padres y abuelos, el amor que necesitan.
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