Una pareja perdió a su perrito de raza pekinés, que falleció asfixiado por viajar en la bodega de un bus de la empresa de transportes Copetran, en un trayecto desde Maicao, departamento de La Guajira, hacia Medellín, en Antioquia.
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Sobre los hechos, se conoció que la pareja llevaba a su perro en un guacal y cumplía con las normas necesarias para que viajara adelante; sin embargo, sería el conductor del vehículo quien no permitió el viaje del canino en el área de pasajeros, diciendo que los animales deben viajar en la maleta.
Relatan sus dueños que en el viaje inicial sí le fue permitido llevarlo con ellos adelante cumpliendo con las normas de sanidad, pero al momento de regresar les cambiaron las condiciones.
La familia no tuvo más opción que acceder pero solicitó estar realizando paradas para verificar el estado del animalito. En una de esas, fueron a verificar y Maxi, como se llamaba la mascota, fue encontrado en malas condiciones y al ser llevado al centro veterinario, falleció tras sufrir un paro respiratorio.
Casi 5 días después, la empresa Cooperativa Santandereana de Transportadores Limitada, Copetran, decidió pronunciarse respecto a lo ocurrido con Maxi mediante un comunicado oficial, en el cual rechazó lo que sucedió.
“Este suceso no define nuestros valores corporativos, nuestra política de viaje con mascotas es clara y firme, rechazamos rotundamente este tipo de situaciones”, dijo la empresa, que anunció investigaciones sobre el suceso.
Por su parte, Maria Fernanda Rojas, ministra de Transporte, le solicitó a la Superintendencia de Transporte que se ejecute una investigación a fondo y ágil sobre estos hechos. Aunque no se conoce qué medidas disciplinarias o de sanción saldrán a la luz, lo cierto es que la funcionaria de transporte pidió poner la lupa en este asunto.
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