La historia parece de película, pero pasó en Colombia y tiene a más de uno con la boca abierta: un joven de apenas 18 años se metió a la torre de control de El Dorado, habló por la frecuencia oficial y le dio instrucciones reales a 43 vuelos. Sí, así como lo lee. Y todo sin licencia, sin curso y sin autorización administrativa.
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El escándalo salió a la luz porque el mismo muchacho, identificado como Juan Diego Chavarro, publicó un video en redes donde se veía dando órdenes como si fuera un controlador profesional. Fue su propio video subido a redes el que prendió las alarmas en el aeropuerto más importante del país.
Según un informe interno de la Aeronáutica Civil, el joven estuvo 1 hora y 24 minutos conectado a la frecuencia, autorizando cambios de ruta, rodajes y hasta despegues, incluido uno internacional. Al principio se pensó que solo había intervenido en tres vuelos, pero la revisión demostró que fueron 43 aeronaves las que recibieron instrucciones suyas. ¡Una locura!
La Aerocivil calificó lo ocurrido como una violación gravísima, algo “intolerable” desde cualquier punto de vista técnico o legal. Y no es para menos: tener a una persona sin estudios ni entrenamiento dando órdenes en un espacio aéreo tan congestionado como el de Bogotá es jugar con fuego. En palabras de la entidad, hubo “exposición crítica al riesgo”, desde potencial pérdida de separación entre aviones hasta confusiones que pudieron terminar en incidentes no reportados.
Lo más curioso es que el joven no llegó allá por casualidad. Es hijo de un controlador aéreo en ejercicio y, según informaron, estaba “observando” el trabajo porque quiere entrar al curso básico del Centro de Estudios Aeronáuticos. Pero esa observación terminó convertida en una peligrosa “práctica” sin permiso.
Para completar, el informe señala que no sería la primera vez que este joven habría tenido acceso a una torre de control. Ese detalle dejó aún más preocupadas a las autoridades, que ahora investigan cómo fue que logró entrar, quién permitió su presencia y por qué no se detectó antes.
La Aerocivil anunció medidas inmediatas y un proceso disciplinario, porque lo ocurrido no es un simple error: es, según ellos mismos, un evento intolerable que puso en jaque la seguridad aérea del país.
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