El Politécnico Jaime Isaza Cadavid volvió a ser noticia, pero no por algo académico. Cerca de diez personas encapuchadas entraron a una oficina dentro del campus y le prendieron fuego. La emergencia fue atendida por los bomberos y, por fortuna, no hubo heridos, aunque sí daños materiales.
Encapuchados quemaron oficina en el Poli y Fico pidió entrada policial
Una oficina del Politécnico JIC fue incendiada por encapuchados. El alcalde exige que la justicia entre a la U para dar con los responsables.
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El hecho ocurrió justo el mismo día en el que Haver González Barrero tomó posesión como nuevo rector del Poli. Él rechazó de inmediato lo sucedido y aseguró que este ataque estaría relacionado con un conflicto interno entre un grupo radical y un grupo sindical dentro de la institución.
El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, se pronunció después de un consejo de seguridad. Fico pidió que tanto la Policía como la Fiscalía ingresen al Politécnico para recolectar pruebas y avanzar en la investigación, abriendo de nuevo el debate sobre la autonomía universitaria y los límites frente al orden público.
“Diez encapuchados ingresan a una oficina del Poli y la queman. ¿Cómo es posible que entren solo los bomberos? En mi concepto, tienen que entrar Policía y Fiscalía a buscar a los responsables”, dijo el alcalde, cuestionando la presencia de grupos radicales dentro de universidades públicas.
Gutiérrez insistió en que la autonomía universitaria no puede convertirse en excusa para impedir la acción de la justicia. “La autonomía es académica, no frente al orden público. Pido que las autoridades actúen cuanto antes y que inteligencia determine quiénes son los responsables”, agregó.
Desde la institución también se pronunciaron oficialmente. En un comunicado, el Poli afirmó que trabajará con las autoridades para aclarar lo sucedido y tomar las medidas que correspondan. Reiteraron que la seguridad de la comunidad universitaria es prioridad y que el ataque es completamente rechazado.
Las autoridades ya iniciaron la búsqueda de pistas dentro y fuera del campus para identificar quiénes estuvieron detrás del incendio y qué motivó realmente esta agresión. Entre tanto, el debate sobre la intervención judicial en los campus públicos vuelve a encenderse en Medellín.
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