De acuerdo con la Fiscalía, los hechos ocurrieron entre julio y septiembre de 2023, cuando este depravado vivía como inquilino en la misma casa que las víctimas, en el barrio Moravia de la comuna Aranjuez.
Para la época de los hechos se conoció que este sujeto no tenía ninguna relación con los menores, únicamente, había tomado en arriendo una de las habitaciones de la casa, que la familia había dispuesto para tener ingresos extra.
Por su parte, el ente investigador explicó que el sujeto abusaba de los niños en los momentos en los que se quedaba solo con ellos y hasta les suministraría bebidas con sustancias que los ponía en estado de indefensión. Era así como aprovechaba para abusar de un niño de 4 años y de su hermana de 6.
Pero resulta que el hermano mayor de las víctimas, de 10 años, se dio cuenta de lo que pasaba y al intentar defender a los pequeños, el sujeto lo golpeó y amenazó para que no contara nada.
Sin embargo, el menor contó todo. Los niños fueron llevados a un centro asistencial, donde activaron el código fucsia y donde denunciaron el hecho ante las autoridades.
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Tras conocer su condena, el sentenciado apeló la decisión ante la Sala Penal del Tribunal Superior de Medellín.
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