¿Dónde está Carlos Mario Ramírez Ochoa? Esa era la pregunta que por más de 10 meses se hicieron sus familiares. Finalmente, luego de buscarlo todo este año, lo encontraron prácticamente momificado en su casa ubicada en el casco urbano de Girardota.
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La dura y triste historia para este hombre comenzó hace un par de años, cuando perdió a su esposa por culpa de una enfermedad. La muerte fue un golpe muy duro que no pudo asimilar, por lo que entró en depresión.
Pero eso no fue todo, Carlos Mario, quien vivía en un cuarto piso de un edificio familiar, comenzó a tener una serie de inconvenientes con sus familiares, motivo por el cual se fue apartando de ellos. En enero pasado cerró su taller donde trabajaba la herradura y quitó los servicios públicos de su apartamento, ubicado sobre la calle conocida como Los Ramírez.
El hombre desapareció misteriosamente y en vista que sus familiares no tenían noticias de él, comenzaron a buscarlo en el municipio, más no en su apartamento. ¿El motivo? Porque para ingresar a su apartamento las personas debían hacerlo por la casa de su hermana, la cual no estaba a favor que lo buscaran por la difícil situación por la que estaba atravesando.
Sin embargo, el esposo de la mujer no aguantó más la incertidumbre, motivo por el cual la mañana de este miércoles, 8 de noviembre, se dirigió al apartamento y lo encontró, pero sin vida y prácticamente momificado.
Funcionarios del Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía se desplazaron al sitio, adelantaron la correspondiente inspección judicial y no lograron establecer las causas de la muerte. El cuerpo fue trasladado a Medicina Legal, entidad que se encargará de hallar las causas que provocaron el deceso.
