Un terremoto de magnitud 7,1 y sus múltiples réplicas sacudieron a la región del Tíbet, China, a las 9:00 a.m. del martes 7 de enero (8:00 p.m. de este lunes festivo 6 de enero, hora Colombia), y dejó un saldo de 106 personas muertas y 174 heridos.
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La magnitud hizo que el terremoto se sintiera en el Himalaya, Nepal, Bhután y el norte de India, además tumbó cerca de tres mil casas en aldeas cercanas y asustó a los visitantes del campamento base del monte Everest.
“Fueron muy fuertes. La gente salió corriendo de sus casas. Se podían ver los cables de los postes sueltos”, dijo Bishal Nath Upreti, del Centro Nepalés para la Gestión de Desastres, una organización no gubernamental de Katmandú.
En los videos publicados en redes sociales se ven techos dañados, escombros amontonados en las calles y los equipos de rescate revisando cada uno de los locales y lugares derrumbados.
La ciudad sagrada de Shigatse es la más cercana al epicentro del terremoto. Está ubicada a 180 kilómetros de distancia y es la sede tradicional del Panchen Lama, el segundo líder espiritual más importante del budismo tibetano.
“Ofrezco mis oraciones por quienes perdieron la vida y hago llegar mis deseos de una pronta recuperación a todos los que resultaron heridos”, dijo el Dalai Lama.
Además las autoridades chinas enviaron ayuda como carpas y tiendas de campaña de algodón, cobijas y otros materiales que mantengan a las personas calientes, ya que las temperaturas están entre los -8.°C y los -18.°C, de acuerdo con la Administración Meteorológica de China.
Aunque en esta región los terremotos son comunes, este es el más intenso registrado en los últimos cinco años, afirmó el gobierno chino.
