En la tarde del sábado, 7 de septiembre, la pareja que ya llevaba más de tres años de noviazgo, dio el paso al altar rodeado de la crema y nata de Colombia.
Y es que no es para menos, Gabriela es una abogada, presentadora y exreina colombiana que nos representó en Miss Universo, hija de una poderosa familia de Cali con origen Libanés y Turco.
Y si fue así, seguro no hicieron falta, porque pudimos ver gente muy poderosa de todas las regiones del país, además de rostros de la farándula nacional.
La ceremonia como tal se celebró a plena luz del día en medio de un jardín lleno de árboles de gran tamaño y la decoración fue sencilla: flores y velas blancas, tapete del mismo color, sillas de madera para los invitados y el sillón donde se sentaron los novios.
A la novia la entregó su padre, Octavio Tafur, mientras que el novio la esperó al lado de su madre, Tutina de Santos, quien como siempre se robó las miradas con su vestuarios, pues usó un vestido de la diseñadora Isabel Henao, que tuvo más de 200 horas de trabajo para recrear un jardín de flores.
Gabriela hizo su aparición con un vestido blanco ceñido, sin tirantes y con bordados. Pero lo que más llamó la atención fue el largo velo que caía sobre su espalda y medía varios metros.
Y ahí llegó uno de los momentos más emotivos de la boda, porque Estaban quebró en llanto cuando vio llegar a la bella mujer que minutos después prometió acompañarlo en las buenas y en las malas, ¡para siempre!
Cuando sellaron la unión, llegó la primera sorpresa que Esteban tenía para Gabriela, apareció uno de los cantantes del Grupo Niche para interpretar la romántica canción ‘Algo que se quede’.
Y las sorpresas musicales no terminaron, porque después de eso comenzó la fiesta. Para ese momento apareció la cantante Greeicy a dar su show en vivo.
Gabriela tuvo su segundo cambio de vestuario, luciendo un vestido blanco corto.
Finalmente, uno de los momentos más nostálgicos fue cuando Juan Manuel Santos les dedicó unas palabras, pues dijo que “los dos son personas con un inmenso carisma” y que “se hacen querer, casi que al conocerlos”.
Además, destacó algo fundamental en ellos: “Tienen una cualidad muy importante en una relación: sentido del humor, nunca lo pierdan”.
Finalmente, les dio un consejo que hasta las demás parejas pueden aplicar:
“Acudan a esos valores que sus padres les han inculcado cuando estén en dificultades, el respeto y la tolerancia. Cuando el viento deja de soplar y el barco está quieto, y se aburran, acudan también a la iniciativa que ambos tienen”.