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  • Los colombianos venden litros, garrafas, shorts, cerveza, entre otras bebidas alcohólicas. / FOTOS: CAPTURA DE PANTALLA
    Los colombianos venden litros, garrafas, shorts, cerveza, entre otras bebidas alcohólicas. / FOTOS: CAPTURA DE PANTALLA

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EN VIDEO: Colombiano se rebusca vendiendo guaro en la Copa América

El colombiano vende la botella de aguardiente, pero quienes no pueden comprarla, les ofrece el shot a 5 dólares, un poco más de $ 20.000.

08 de julio de 2024

Selección Colombia

Para nadie es un secreto que un colombiano se puede identificar a donde quiera que vaya, pues la alegría y, sobre todo, su capacidad de trabajo son algunas de las características que sobresalen. Así quedó evidenciado en un video que se ha viralizado en redes sociales, en el que un grupo de colombianos llamó la atención por la venta de shots de aguardiente.

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La situación quedó registrada previo al partido de cuartos de final entre la Selección Colombia y Panamá, cuando, a las afueras del State Farm Stadium de Glendale, Arizona, armaron su negocio. “Tapa azul por shots” era una de las grandes pancartas que sostenían, impulsando la venta de su emprendimiento.

Cuando una persona se les acerca, uno de los colombianos dice: “Si no tiene para la botella, le vendemos el shotcito”, mientras otra persona agrega: “Shotcito a 5 dólares”. Pero esto no era lo único que estaban vendiendo, ya que tenían una nevera llena de cerveza.

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El video ha generado una ola de reacciones en redes sociales. Mientras algunos elogian la laboriosidad de los colombianos, otros aseguran que es una vergüenza.

“La colombianada, qué vergüenza. En EE.UU., vender licor sin una licencia es ilegal, y ni hablemos del comercio informal. Donde los pillen, los encanan y los deportan”, comentó un usuario. Por otro lado, otro usuario defendió la situación diciendo: “Los que hemos sido migrantes sabemos lo duro que es tener un antojo. No me acuerdo cuánto pagué por un pandebono en CDMX por aquellos días. No fue tan caro como en el aeropuerto El Dorado, pero casi”. Otro simplemente resumió: “Jajajaja, la plata está hecha”.

Q’hubo Bogotá / Camila Carranza

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