Una médica de Chinchiná, Caldas, encendió las alarmas en el sector salud después de denunciar en redes sociales que un paciente la acosó dentro del consultorio donde trabaja. El caso ha generado rechazo entre colegas y usuarios que exigen más protección para el personal médico.
Lea también: Prófugo de la justicia ecuatoriana fue capturado en La Estrella
La joven profesional relató lo ocurrido en un video que se volvió viral, compartido inicialmente por la cuenta Colombia Oscura. Según contó, el hombre, de más de 20 años, llegó al centro médico diciendo que tenía dudas sobre sus partes íntimas, algo que ella consideró normal, pues es una consulta frecuente.
Aunque en el video aparece etiquetada la ciudad de Medellín, se pudo confirmar a través de la Secretaría de las Mujeres que los hechos no ocurrieron allí, sino en el municipio de Chinchiná, en el departamento de Caldas
Mientras le hacía la historia clínica, el paciente dijo que tenía problemas en sus partes genitales, por lo que la médica comenzó a formularle preguntas médicas y a preparar la orden de exámenes. Pero, de un momento a otro, el sujeto empezó a hacerle preguntas personales sobre su vida sexual, completamente fuera de lugar.
“Me preguntaba cosas que no tenían nada que ver con la consulta”, dijo en su testimonio. Aunque muchos pacientes llegan con inquietudes íntimas, esta vez, asegura, el hombre cruzó todos los límites y la hizo sentir incómoda y vulnerable.
La situación se volvió más tensa cuando llegó el momento del examen físico. La médica evitó dar detalles, pero sí dijo que el sujeto no tenía nada de lo que había dicho y que durante la revisión ocurrieron cosas que no quiso describir por seguridad. “Nunca me había pasado algo así. Me quedé temblando”, expresó.
Aun con el miedo encima, terminó la consulta lo más rápido posible, le entregó los papeles y lo sacó del consultorio. Cuando él salió, ella rompió en llanto. Luego pidió al área de facturación que no volvieran a asignarle citas con ese paciente y dejó constancia escrita de lo ocurrido.
Para su sorpresa, le dijeron que no era la primera vez: una médica había pasado por una situación casi idéntica la semana anterior.
La doctora pidió que estas situaciones no se normalicen y advirtió que muchas profesionales están expuestas porque atienden solas y sin acompañamiento de seguridad. “El daño mental ya está hecho. Uno queda desprotegido”, finalizó.
Si te interesa este artículo puedes acceder a más información visitando nuestra sección Local.
