Entre los más buscados están alias Matías, cabecilla del Eln, por quien ofrecen hasta 500 millones de pesos; alias el Calvo, del mismo grupo, con 400 millones de pesos; alias Mike, del Clan del Golfo, con 200 millones; y alias Barbas y Guaricho, del Frente 36 de las disidencias de las Farc, con 200 millones cada uno.
A esa lista se sumó alias Davie, un exfirmante del acuerdo de paz que habría robado armamento de la Unidad Nacional de Protección (UNP) y hoy estaría delinquiendo con el Frente 18 de las disidencias en Briceño, Valdivia e Ituango. Por él se ofrece una recompensa de hasta 50 millones de pesos.
El anuncio se dio durante un Consejo de Seguridad y Oportunidades Sociales realizado en Tarazá, donde el mandatario destacó una reducción del 20 % en los homicidios en Ituango, Valdivia, Cáceres y Tarazá, aunque advirtió que los artefactos explosivos siguen siendo una gran amenaza.
“Muchos de los hechos violentos recientes se deben a las explosiones que ponen los delincuentes, atacando a la población civil y a nuestros uniformados”, explicó Rendón.
El gobernador estuvo acompañado por los alcaldes de los cuatro municipios, quienes coincidieron en que, aunque los resultados son positivos, la presencia de estos grupos ilegales aún mantiene en zozobra a varias comunidades.
La apuesta ahora es clara: seguir bajando la violencia y capturar a los responsables de sembrar el miedo en esta región del departamento.
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