Aleje el peligro y consuma alimentos en buen estado

Le explicamos en qué consiste la inocuidad alimentaria y cuál es su importancia.

24 de noviembre de 2024
Estilo de vida

Los alimentos son los que nos dan la vida, pero al mismo tiempo nos la pueden complicar si los que consumimos están en mal estado.

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No hay sensación más placentera que comernos un buen plato de comida, sea en la casa, en un restaurante o en un punto de venta callejero. Donde quiera que lo hagamos, es importante que tengamos precaución y nos aseguremos de que los productos que preparemos por nuestra cuenta o que nos sirvan en un negocio estén en las condiciones ideales.

De eso se trata la inocuidad de alimentos y por eso es que entidades como la Secretaría Seccional de Salud de Antioquia, al igual que otras entidades territoriales de salud, son insistentes en sus recomendaciones, sino también en sus labores de inspección, vigilancia y control, para verificar que quienes preparan, comercializan, almacenan, distribuyen, transportan y ejercen cualquier actividad en la que se manipulen productos de este tipo, lo hagan siguiendo las normas de salubridad.

¿Qué pasa en Antioquia?

Según cuentan en la Seccional de Salud de Antioquia, los casos de enfermedades transmitidas por alimentos han venido en aumento en el departamento, y es importante que tanto las personas como los establecimientos de venta de comida, tanto restaurantes como los callejeros, tengan en cuenta tanto las normas vigentes como las recomendaciones para evitar situaciones de este tipo.

En Colombia, la Resolución 2674 de 2013 es la norma que establece “los requisitos sanitarios que deben cumplir las personas naturales y/o jurídicas que ejercen actividades de fabricación, procesamiento, preparación, envase, almacenamiento, transporte, distribución y comercialización de alimentos y materias primas de alimentos y los requisitos para la notificación, permiso o registro sanitario de los alimentos, según el riesgo en salud pública, con el fin de proteger la vida y la salud de las personas”.

Tome nota de la información y las recomendaciones que le entregamos en este especial, para que tenga cuidado al consumir alimentos.

¿Por qué debemos cuidarnos?

1. Si usted consume un alimento y al momento dice sentirse dispuesto, pero cree que simplemente le cayó mal, tenga cuidado. Tal vez no sea grave... o sí. Este puede ser uno de los primeros síntomas que le indican que el producto que se comió no estaba en las condiciones óptimas o no fue preparado teniendo en cuenta las recomendaciones de salubridad que exigen las autoridades a los establecimientos gastronómicos.

2. Los síntomas más comunes para detectar una enfermedad gastrointestinal proveniente de estos casos son el vómito y la diarrea. En otras situaciones es posible que se presente fiebre y dolores abdominal y de cabeza, que se deben en su mayoría a consumo de alimentos o agua en mal estado, que provoca estas y otras situaciones que afectan la salud de los consumidores e incluso, en ocasiones, de quienes los preparan.

3. El Códex Alimentarius es un compilado de normas internacionales, en el cual se apoyan más de 188 países en el mundo, incluyendo Colombia, para garantizar que la comida que ingerimos sea inocua, es decir, apta para su consumo, y que los establecimientos como restaurantes o puestos callejeros la puedan comercializar. Esta información está disponible para consulta en Internet para todos los interesados en seguir sus guías.

4. La OMS y la ONU son claras en su mensaje: “Responsables de unos 600 millones de casos de enfermedades transmitidas por alimentos en el mundo, los víveres no inocuos son una amenaza para la salud humana y las economías, provocando cada año 420.000 muertes y una pérdida de productividad cercana a los 95.000 millones de dólares”. De allí la importancia que tiene este tema para la humanidad.

5. Estas entidades advierten que la carga que esta situación tiene en los sistemas públicos de salud de los países en el mundo se compara a la que producen otras enfermedades como la malaria o el VIH-SIDA. La diferencia está en que “las enfermedades provocadas por los alimentos no inocuos se pueden prevenir con educación, higiene y la manipulación adecuada de los alimentos”.